Trabajos en la juventud

Trabajos en la juventud

 

Trabajar en lo que sea cuando eres joven y “tienes todavía tiempo”

En ese momento de tu vida cuando el mundo empieza a abrirse ante tus ojos te sumes en un dilema entre ganar dinero poniéndote a trabajar de lo que sea o seguir estudiando. A esta temprana edad  muchos todavía somos inmaduros y muy pasotas. Y puede que no sea porque se nos dan mal sino porque le damos mayor valor al dinero que a una formación que a esta edad podemos considerar hasta innecesaria.

Con el paso del tiempo la mayoría acabamos viendo las cosas de otra manera y acabamos reconociendo que volver a estudiar ahora es más complicado que en el momento que decidimos dejarlo, pero es necesario.

Una especialista

Carme Turó, especialista en inserción laboral, ha asesorado a muchos adolescentes de 16 años que no querían seguir estudiando y considera que lo hacen porque “tienen unas expectativas muy grandes de ganar dinero aunque no saben como”.

“Están metidos en la rueda del consumismo y lo que más les interesa es ganar dinero para comprar cosas. No tienen visión de futuro”, afirma.

Turó cree conveniente que se estudie como mínimo un grado medio o superior de Formación Profesional para poder hacer prácticas en alguna empresa y entrar en el mercado de trabajo mejor preparados.

 

El último informe de Adecco, resalta que algunos de los sectores más importantes actualmente requieren titulados en FP, casi el 60% de las ofertas de trabajo. Además, su tasa de desempleo es mucho menor que la relativa a otras formaciones, no superando el 7%. Sin embargo, el número de estudiantes que apuestan por esta opción sigue siendo demasiado baja para la demanda existente.

Algo a lo que no debemos renunciar, ni siquiera si se consigue un trabajo, es a la formación continua. María Concepción García, vicerrectora de Empleabilidad y Emprendimiento de la Universidad Complutense de Madrid, cree que “los perfiles profesionales están cambiando muy rápidamente”. “Hoy en día existen ofertas de empleo que hace dos o tres años no podíamos ni imaginar, por lo que la especialización a través de másteres y formación permanente son fundamentales”.

De la misma manera, las conocidas como soft skills son algo cada vez más demandado por las empresas. Habilidades como la escucha activa, el pensamiento crítico o el trabajo en equipo son fundamentales para el desarrollo actual de los trabajos.